Demonios! Ya es Navidad...
Y no es que -no me guste- la temporada...
Pero es que siento que hay demasiada -felicidad- y -entusiasmo- prefabricados. Es como si "algo" nos predispusiera a ser felices a huevo. ¿Se trata de una dicha genuina entonces?
O quizás hay algo dentro de nuestro interior que nos predispone cada vez que vemos los colores verde, dorado y rojo tan cerca uno de otro, o el alucine de cientos de foquitos multicolores es el motor culpable de un montón de compras apresuradas, no pensadas, cargadas a la tarjeta de crédito, compre ahora, comience a pagar en marzo del año próximo y arrepiéntase hasta el 2008.
Y los mexicanos, siempre tan ocurrentes, que hasta bautizamos las fechas como "el maratón Guadalupe Reyes", haciendo alusión a que es un período comprendido entre el 12 de diciembre ( fiesta de la Guadalupana para los católicos ) y el 6 de enero ( Día de los -cada vez menos celebrados- Reyes Magos ). Dicén los que saben que el maratón no es tanto por andar corriendo entre centros comerciales y visitas a familiares de los que nunca nos acordamos en realidad, sino porque se la pasa uno chupa y chupa. Salud!
Volviendo a la cuestión del barullo y la falsa sociedad, George Michael solía cantar "these are the days of the empty hand / Oh you hold on to what you can / And charity is a coat you wear / Twice a year" A poco no? La caridad es un abrigo que nos ponemos dos veces al año...
Y saben lo peor? Detrás de todo este cinismo y acidez... la verdad es que desearía pasar una Navidad con quien amo, abrazarnos mientras tomamos un poche caliente, tener las luces apagadas y tan solo el resplandor de las luces en el árbol en nuestras caras.
Y saben lo peor? Detrás de todo este cinismo y acidez... la verdad es que desearía pasar una Navidad con quien amo, abrazarnos mientras tomamos un poche caliente, tener las luces apagadas y tan solo el resplandor de las luces en el árbol en nuestras caras.
